Las cosas han avanzado rápido en Brasil desde que su cámara de diputados aprobó la regulación de las apuestas deportivas y el iGaming en diciembre. A las partes interesadas les parece que los legisladores parecen dispuestos a trabajar a buen ritmo, y los pronósticos iniciales sugieren que podríamos tener los ojos puestos en un marco regulatorio bastante claro dentro de seis meses. Esto, a su vez, implicaría la presentación, revisión y emisión de licencias en alrededor de un año a dieciocho meses, según mis estimaciones. Los reguladores parecen estar tocando la fibra sensible en términos de juego responsable, gestión de sistemas de pagos a la industria regulada, aplicación de medidas contra el mercado negro y aumento de las capacidades de protección de los jugadores hasta ahora, aunque puede haber algunos obstáculos en el camino. Sólo el tiempo dirá cómo será el futuro mercado brasileño, pero hay varias formas en que los operadores pueden asegurarse de estar preparados para el éxito cuando se abran las solicitudes de licencia.

Liberando el mercado

Para ir un paso adelante, los operadores y proveedores pueden familiarizarse con lo que ya está claro en el proyecto de ley y tomar medidas para garantizar su cumplimiento general. Por ejemplo, está claro que el reconocimiento facial y la verificación de las bases de datos de jugadores existentes serán uno de los principales temas, además de reforzar las prácticas de juego responsable y el compromiso de los operadores con la prevención de la manipulación deportiva. Los detalles de las reglas de autoexclusión aún no se han compartido, y si se implementarán por licencia, marca o plataforma y más detalles al respecto. Es imprescindible realizar una auditoría de las herramientas, capacidades y procesos existentes como preparación para una regulación más detallada.

Un tema cada vez más importante es el cumplimiento de las leyes de protección de datos, particularmente dado el hecho de que los controladores y procesadores de datos procesarán datos confidenciales (como datos biométricos y reconocimiento facial), y esto tendrá consideraciones importantes según las consideraciones legales y de seguridad aplicables para muchos. Otras consideraciones clave son los canales eficientes para el cumplimiento, la interacción con el cliente (medidas y controles de responsabilidad social), las defensas contra el lavado de dinero y el fraude, y la capacidad de aceptar pagos localizados sin problemas. Cuando se implementa esta limpieza, la oferta de productos en sí también es algo que necesita evaluación junto con cómo se regularán o restringirán aspectos de los juegos, como los bonos (registro o retención) y los premios mayores.

Impuestos y cumplimiento: un acto de equilibrio

Los jugadores preferirían no pagar impuestos sobre las ganancias, pero en el proyecto de ley se ha incluido un 15% anual. Habrá más información disponible cuando se emitan las ordenanzas, ya que existe cierta incertidumbre sobre qué informes se requerirán en este caso y por qué parte y en qué momento. Aún no está claro si esto será responsabilidad del jugador, de la plataforma de software o del operador, y si se aplica a un retiro, a una cantidad ganadora, a las ganancias calculadas al final de un período específico y, además, si las modificaciones del impuesto sobre la renta se incluyen correctamente en este proyecto de ley sobre la regulación del juego. Las provisiones que son demasiado onerosas para el jugador pueden canalizarlas hacia el mercado negro, por lo que el equilibrio es, como siempre, clave.

Otro aspecto clave del cumplimiento es prevenir la manipulación de los deportes. Los operadores tienen un papel que desempeñar en la erradicación del amaño de partidos y esto es increíblemente importante para el futuro sostenible de las apuestas deportivas en general, y para los amantes de los deportes brasileños. Los brasileños tienen en alta estima sus deportes y están bien informados, y los operadores pueden ayudar a evitar problemas colaborando con las diversas partes interesadas involucradas y adoptando una postura vigilante ante el comportamiento sospechoso y la colusión de los jugadores.

Mantenerse a la vanguardia

El factor diferenciador entre éxitos y fracasos en Brasil es tener el “toque brasileño”. Los operadores pueden asegurarse de que están en línea con la regulación, pero deben ser atractivos para los clientes. Los clientes brasileños tienen gustos específicos, con diferentes formas de promocionar marcas y deportes, y de celebrar sus victorias. Un enfoque homogéneo hacia Brasil no funcionará. El país es grande y diverso, y será necesario un enfoque mucho más matizado y localizado.

Los operadores deberían dedicar los próximos meses a asegurarse de conocer al jugador brasileño, ganar visibilidad de marca y utilizar medios locales para hacerlo, como el aumento de personas influyentes en las redes sociales, el especial estilo brasileño para vivir y disfrutar la vida, y la activación de la marca. Por supuesto, esto evolucionará a medida que se finalice la legislación y, sin embargo, es probable que el éxito se encuentre en una combinación de marketing excelente, un producto sólido con una experiencia de usuario perfecta y un sabor local, que diferenciará a los operadores de sus competidores en lo que será uno de las aperturas de mercado más interesantes en años.